Vivimos un tiempo donde se tiende a relativizar de alguna forma algunas decisiones que se están tomando en política. Asistimos a un tiempo donde los ciudadanos asistimos a un desinterés de la política. A colocar a todos a izquierda o derecha de la misma forma. A una cierta convulsión de lo que ha venido representando la Democracia en nuestro país en definitiva. Podemos estar de acuerdo o no, pero tengo la sensación de que estamos viendo como algo normal, aquello que no es normal, pero que está extendiéndose por otras zonas del continente europeo. Nos estamos convirtiendo los ciudadanos en unos conejillos de indias donde hay cada vez más experimentos de partidos de todo tipo y color. Asistimos también a un trumpismo de la política que cada día penetra más en la sociedad sin parecer darle importancia a lo que ello está representando ya en aquellos territorios donde la derecha del PP necesita de pactos con la ultraderecha de Vox. Ya hay ejemplos en alguna Comunidad y se pueden comprobar las consecuencias de esos pactos y gobiernos en los territorios. Me preocupa esta normalización porque las decisiones de esos Gobiernos formados por fuerzas políticas de esos colores tienen efectos en los avances y consolidación de derechos sociales, civiles y políticos de estos últimos años.
Y ante estas reflexiones, se me ocurre hacer algunas preguntas. Se han valorando los resultados que en esta última legislatura han situado el nivel de desempleo en el más bajo de la historia reciente?. Se han valorado el mayor número de contratos indefinidos que ha habido en la historia, producto de la última reforma laboral?. Se han valorado el mayor incremento de las pensiones de los últimos años?. Se han valorado la subida del SMI que ha repercutido en las familias con mayor vulnerabilidad?. Se han valorado los esfuerzos en ayudas económicas a los industriales, autónomos y empresas como consecuencia de lo que perdieron durante el covid?. Se han valorado las ayudas de los expedientes temporales de regulación del empleo como consecuencia del covid?. Se han valorado los esfuerzos para que nunca antes hayamos tenido la cantidad de proyectos industriales que están cambiando o van a cambiar el sistema productivo de nuestra región?. Se han valorado el que seamos junto con Portugal, el país que menos paga por el coste de la energía, producto de la negociación del Presidente del Gobierno con Europa?. Se han valorado el que se haya obligado a que la gran Banca y las grandes empresas energéticas del país tengan que pagar un impuesto para ayudar a la situación del país?. Se han valorado las ayudas a las familias y el cheque de 200 € para las familias vulnerables?....Se han valorado tantos esfuerzos que han ayudado en muchísimos casos a tener una mejor posición económica o social, o por lo menos a ayudar a pasar la crisis un poquito mejor???. A la vista de los resultados, no se han valorado y no se han votado. Se ha votado en otra clave que posiblemente tiene que ver más con lo que se ha venido decidiendo y hablando desde Madrid, o que el ciudadano está cansado de tanta escenificación y lo paga quien tiene el poder, porque el ciudadano lo que quiere es descargar aunque no sea el responsable.
No se han valorado estos ejemplos y otros, porque si se hubieran valorado a la hora de votar, el resultado de estas últimas elecciones habría sido otro. Porque a pesar de que una gran parte de la prensa y otros medios económicos han querido impedir que todas esas medidas se hayan puesto en marcha, hoy muchas familias han tenido la oportunidad de tener un empleo más fijo o unas pensiones más dignas. No se ha votado en clave de esas ayudas y esfuerzos que el Gobierno de coalición ha conseguido. Está claro que no. Y aquí es donde tiene que producirse la reflexión del porqué habiendo conseguido tanto en tan poco, los ciudadanos no han considerado que tanto el PSOE como Podemos hubiera sido su opción política a la hora del voto?. Han pesado más algunos acuerdos en el Parlamento con fuerzas independentistas catalanas y vascas desde que se produjo la moción de censura?. Y si esto es así que es muy posible, porqué cuando lo ha hecho el PP no es tan castigado o criticado en el país cuando la derecha de Aznar y Rajoy también llegaron a acuerdos con ellos?. Durante la campaña electoral la derecha y la extrema derecha han vuelto a situar electoralmente el tema de ETA y consiguieron que se hablara más de ello por la mayoría silenciosa que estando situada en el centro, pudiera haber sido la que haya decidido el resultado. También esa cantidad de anuncios cada semana se utilizó para que se hablara más de ellos que de lo que se había hecho en los territorios. Y también porque sería excesivamente largo, pero hay que buscar errores de planificación en territorios por hacer un excesivo seguimiento de lo que se decidía o hablaba desde Madrid, pero que afectaba a todos.
Escribía hace unos días que es en los tiempos difíciles cuando más se aclaran y encuentran respuestas. Puede que dentro de cincuenta días volvamos a tener una repetición de resultados o que desde la izquierda se consiga generar una necesidad que penetre en las capas sociales medias y bajas concienciando en el voto para parar a la derecha y a sus consecuencias. Puede que esa mayoría silenciosa que decide elecciones tenga hoy más que nunca la oportunidad de decidir por el progreso o por el retroceso en los derechos conseguidos en los últimos años. Porque también todo esto se decide el 23 de julio con nuestro voto. Nuestro país no es propiedad de nadie ni le pertenece a nadie, tampoco a la derecha, pero hay que cerrar las heridas y conseguir que nuestro país siga avanzando. Nos va en ello mucho, tanto como para seguir avanzando y no volver a otros tiempos.
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