Esta semana he iniciado una nueva etapa como tertuliano en una cadena de radio. Onda Cero Badajoz me propuso hace unos días participar en una tertulia semanal que tiene como nombre "la tertulia de la Academia". Debatimos con total libertad y expresamos nuestra opinión sobre temas y asuntos que tienen contenido político tanto a nivel local como regional y también sobre otros asuntos que pueden tener interés para los ciudadanos y para los oyentes. Proponemos ideas y expresamos puntos de vista diferentes. Una manera de llevar a cabo un compromiso con el contacto de la gente de forma amena a través de las ondas, donde escuchar y hablar son dos argumentos para expresar una manera de pensar y reflexionar. Así lo haré cada martes mientras la cadena así lo quiera, o por mi parte entienda que llega el momento de parar y descansar.
Como he comentado en otras ocasiones es una manera de seguir comprometido y de seguir aprendiendo. Siempre es grato compartir experiencias y esta es una de ellas. Conlleva tiempo para preparar los temas y expresar una opinión lo más argumentada posible, pero es enriquecedor. Me gusta y no suelo decir que no a comprometerme. Como decía en el inicio de mi blog, es otra manera de dejar de estar en silencio y reflexionar en voz alta, en esta ocasión a través de la radio. En algunas entradas del blog he comentado sobre el papel de los tertulianos en algunos medios. Hoy no hay ningún medio que no tenga tertulias y esto tiene sus razones. Hay mucha competencia y mucho espacio. También, creo que es cierto que hay un nivel de tertulianos que atraen por sus argumentos y que los distintos programas rivalizan en este espacio. Quizás es una forma de trasladar, desde el medio, una imagen de pluralidad y buscar equilibrios a la hora de difundir o crear opinión.
Como suelo decir, desde mi modesta opinión, es una manera de practicar la libertad desde el compromiso del compartir. Expresando lo que se piensa para tratar de compartir reflexiones, conversaciones e ideas sobre la base del mayor respeto a los demás y también como no, desde la libertad de la palabra. Como forma de cuestionarme la realidad a la que entre unos y otros nos llevan a los ciudadanos. A una realidad que pretenden hacernos creer que vivimos, pero que en muchas ocasiones se olvidan de que la sufrimos. Cuestionarme los temas para pensar, porque quizás hoy uno de los problemas que tenemos es que no dedicamos tiempo y esfuerzo a pensar. Quizás es que vivimos en una sociedad donde casi todo nos lo dan hecho o que nos lo han facilitado de tal modo, que consiguen que el esfuerzo, la independencia y el pensar por uno mismo y tener opinión no tenga valor.
Y esa es también la idea, o así lo entiendo desde el espacio de una tertulia. La de motivar no sólo al conocimiento y a la información, también al debate de ideas y a la diversidad de la opinión. Compartir es enriquecerse en el conocimiento porque consigue que aprendamos siempre algo nuevo, pero también es expresar una manera de ver las cosas y priorizar en el interés de estar para hacer, antes que en el estar para ser. Con el argumento y la reflexión como forma de expresarme frente a las amenazas de la resignación y de la indiferencia que en gran medida existe en la sociedad actual, entendí y estuve de acuerdo en colaborar con Onda Cero para seguir proponiendo y compartiendo ideas y reflexiones.
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