Durante éstos últimos días han recobrado protagonismo y actualidad las plataformas de la España Vaciada. Han presentado en el Congreso 101 medidas en forma de alternativas con las que según las más de 160 plataformas que la integran, se podría reequilibrar el país y el medio rural sería tan atractivo para vivir como una gran ciudad. La España Vaciada según los documentos presentados afecta a 28 provincias de 12 Comunidades Autónomas, y no sólo a pueblos, también a alguna capital de provincia como es el caso de Soria. No es sólo la cuestión de haber perdido servicios que podemos considerar como esenciales, porque para pueblos que están en esta situación casi todo forma parte de la necesidad, sino que sus pocos habitantes se encuentran sin oficinas bancarias, farmacias o incluso centros de salud. Muchos de ellos tienen que desplazarse varios kilómetros para ser atendidos por servicios médicos.
En las últimas elecciones generales, el movimiento ciudadano Teruel Existe llegó al Congreso de los Diputados en forma de agrupación de electores. El movimiento que ha sido un símbolo de la lucha contra la despoblación fue el más votado en su provincia, consiguiendo un Diputado y dos Senadores. Ya lo decían en su presentación entonces, habían sentado el precedente. Habían puesto el problema de la despoblación en la primera línea de los debates y de la acción de Gobierno. Habían conseguido que se pasara de las palabras a los hechos. Los hechos, las realidades de esa sensibilidad no existían, porque hasta entonces y quizás por ello, un solo voto no había sido valorado. Quizás también por aquel voto en aquella sesión, en estos días se está celebrando un foro nacional para la repoblación de la España Rural en la que están todos los líderes políticos y en la que el Presidente del Gobierno ha ofrecido una alianza nacional contra la despoblación.
De mi etapa en la Junta recuerdo que había un Alcalde de la zona del norte de la provincia de Cáceres que siempre insistía y con razón con el tema de la fibra óptica para su zona. El no exigía el tener más recursos. El pedía tener los mismos que los demás. Y decía con razón que si su pueblo no tenía los mismos servicios, porqué tenía que pagar los mismos impuestos que los que sí lo tenían. Esta es una reflexión que puede verse un poco lejos desde algunos sitios, pero es muchas veces el ingrediente que llena movimientos ciudadanos que después se convierten en plataformas que coinciden y que ven la oportunidad de convertirse en fuerzas influyentes y más en la situación de polarización política que actualmente existe en nuestro país.
El problema de la despoblación es un problema estructural que hay que afrontar. Han coincidido en estos últimos días tres acontecimientos que ponen en la agenda política el problema del reto demográfico y la despoblación. La presentación por el Gobierno de un Plan de medidas con una inversión de diez mil millones, la presentación del documento de la España Vaciada y un Foro con representación de todos los líderes en una de las provincias que lo sufre en mayor medida, como es Soria. Un pequeño resumen de las tres presentaciones coincide en que es necesario abordar el proceso de reequilibrio territorial de nuestro país y es positivo que sea esta la coincidencia, porque es pensar en clave de cohesión territorial.
La situación en muchos de nuestros pueblos no admite mas prórrogas ni más demoras. Quienes tienen la responsabilidad pública no deberían pensar en claves de tacticismos ni batallas electorales, porque el problema de la despoblación no entiende de colores. Se trata de ciudadanos y de empresas, que deben de tener las mismas posibilidades y los mismos recursos por los que pagan los mismos impuestos que aquellos que los disfrutan y les sirven para poder desarrollar su proyecto de vida. Queda mucha faena por delante y es por ello que es muy oportuno que todos los territorios tengan elaborados sus planes. Es muy positivo que aparezca en la agenda política de las responsabilidades de los gobiernos y de los partidos....porque como decía el diputado de Teruel Existe “Insistimos en la terminología de España vaciada porque queremos poner en evidencia que fue el Estado, con sus políticas equivocadas, con su modelo de Estado equivocado en España, el que generó esas tremendas diferencias territoriales que existen actualmente. Y que es al Estado al que le corresponde en primer lugar contribuir a solucionarlas”.