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domingo, 30 de junio de 2024

La gestión de la mayoría absoluta....

Una vez que se celebran unas elecciones y se conocen los resultados, nadie duda de la legitimidad democrática de los gobiernos fruto de las mayorías absolutas, pues son la libre elección de los ciudadanos en las urnas al depositar su voto. Entrar en las causas de la consecución de una mayoría absoluta sería muy extenso de explicarlo por aquí, pero en alguna ocasión escuché y pude reflexionar sobre ello. No se ganan las elecciones por un solo motivo y sí se pueden llegar a perder por una sola causa. Por no extenderme y como un factor muy importante que influye, también hay que tener en cuenta la repercusión que tienen factores que no tienen que ver con el territorio o la ciudad en cuestión, por la cada vez mayor crispación y polarización política que está extendida y establecida en cualquier ciudad o Comunidad Autónoma y a las que los aires de la política nacional invaden y consiguen que buena parte del voto esté influenciado por ello. Evidentemente también hay un gran peso en lo interno en todos los sentidos de cada ciudad o Comunidad, porque sobre todo en las municipales los ciudadanos votan en muchos casos a las personas que lideran una lista, aunque cada vez influye más la política nacional también en unas elecciones locales.

Y con este debate en cuestión de las mayorías absolutas reflexionábamos hace unos días un grupo de compañeros cuando se ha cumplido el primer año de mayoría absoluta del PP en la ciudad de Badajoz. Un primer año que coincide con la presentación de unos presupuestos municipales que están prorrogados desde el año 2022. Si buscáramos un titular de su gestión, este podría ser el de trazo de titular más grueso de este primer año, porque es anormal no tener unos presupuestos actualizados desde hace meses teniendo en cuenta la mayoría absoluta con la que cuenta. A ello se podrían añadir las privatizaciones de servicios municipales y diferentes conflictos con los trabajadores municipales y sobre todo con la policía local. La oposición, es difícil valorar una gestión de la oposición por la mayoría absoluta con la que se cuenta por la actual corporación y por el rodillo con el que se actúa, pero en la ciudad hay mucha desigualdad entre barrios, y los recursos e infraestructuras dejan mucho que desear porque hay muchas diferencias y la frontera de la desigualdad sigue creciendo porque hay barrios donde se invierte todos los años y barrios donde no se invierte en años, y en un espacio donde se genera la desigualdad generándose diferencias hay mucho para trabajar.

Quizás habría que destacar algunas cuestiones de futuro sobre los que se debería prestar más atención porque nos puede dar una idea de si la ciudad quiere ser la referencia o quedarse simplemente en ser la ciudad más poblada de la región. Hay que apostar fuertemente por el entorno de la Alcazaba y sus adentros como oportunidad para ser una ciudad que multiplicara sus oportunidades de convertirnos en un referente turístico y como espacio de inversión para la recuperación del enorme patrimonio y riqueza cultural que disponemos. Hay que conseguir cuanto antes que los grandes proyectos anunciados y no iniciados tengan un futuro más allá de las palabras y pasar a convertirse en argumentos creíbles que le den una nueva dimensión a la ciudad. Hay que planificar el espacio industrial y de negocio para que no sea un imposible moverse entre la lentitud de la burocracia administrativa y la tardanza en hacer realidad los proyectos que se pierden en el tiempo desde que se anuncian hasta que se inician. Hay que planificar las inversiones para que los recursos e infraestructuras de los barrios de la ciudad no se abandonen y podamos empezar a hablar de una ciudad donde es la Administración la que está cerca de los ciudadanos. Hay que invertir en los servicios en los que el ciudadano dentro del ámbito de lo cotidiano se queja porque es lo básico donde se evidencia el abandono y la desidia cuando paseamos y nos movemos por las calles, parques y jardines comprobando el desigual tratamiento dependiendo de la zona de la ciudad de la que hablemos. Y se podría seguir mirando hacia el mayor patrimonio natural ambiental que puede llegar a tener una ciudad. Cuántas ciudades quisieran tenerlo, pero ambientalmente bien conservado para poder disfrutarlo en toda su extensión y posibilidades. 

Escuchaba la presentación de los presupuestos de 2024 a los que le van a quedar menos de seis meses una vez que se aprueben, salvo se prorroguen, y el Concejal Delegado titulaba "un nuevo presupuesto para una nueva ciudad". La frase y la temporalización de las cuentas son de inicio una contradicción manifiesta. Porque pensar en futuro es planificar a largo plazo y no con unas cuentas para medio año. Tiempo habrá para seguir valorando si en el futuro se va a desarrollar uno de los proyectos aprobados hace unos meses como ha sido la adhesión de Badajoz a la ley de grandes ciudades. Cuando se aprobó se comprometieron a ponerlo en marcha a principios de 2025 y entre otras razones está la de configurar una ciudad nueva con unos distritos, unos presupuestos y unos nuevos servicios. Está por comprobar si las palabras una vez más van a ser fruto de una promesa que vuelva a ser renovada. Está por comprobar si una vez con presupuestos actualizados, el rodillo de la mayoría absoluta va a ser lo que siga. Seria conveniente y positivo que aquello que se decide por la mayoría absoluta contara con la opinión favorable de la ciudadanía, porque cuando se comparten las políticas éstas se entienden y las cosas funcionan razonablemente mejor. Tiempo al tiempo.

jueves, 27 de junio de 2024

Creer en la participación de la sociedad civil....

En sesión plenaria del Ayuntamiento de Badajoz de noviembre de 2020 se aprobó  por la práctica unanimidad de los grupos políticos el Reglamento de Participación Ciudadana. Los grupos mayoritarios expresaban en sus declaraciones que marcaría un antes y un después en las relaciones entre el Ayuntamiento y los ciudadanos o los diferentes colectivos y asociaciones vecinales. El Concejal del área que es el mismo que actualmente, valoraba “el prestigio que va a tener este reglamento de futuro que va a poner la participación ciudadana en la vía correcta para que nuestra ciudad se convierta en la capital de Extremadura”. En muchas ocasiones las palabras superan la realidad y este que nos ocupa podría ser un ejemplo. El Reglamento se publicó  y tres años y medio después ahí está, sin haberse desarrollado ni constituido ninguno de los apartados ni cumplidos los compromisos contemplados.

En pleno del Ayuntamiento de Badajoz de julio 2023 se aprobó por unanimidad el expediente para acogerse a la Ley de Modernización del Gobierno Local, lo que se conoce como “ley de grandes ciudades”, para formar parte de un “club” al que ya pertenecen otras 135 capitales y poblaciones de España y que en valoraciones del Alcalde, permitirá descentralizar la administración para ser más eficaces, ágiles, modernos y con ello se llegará a estar más cerca de los vecinos. Tal y como se recoge en lo aprobado por la Asamblea de Extremadura hace dos meses, Badajoz asumirá nuevas competencias y por tanto recibirá más ingresos del Estado. Además se potenciarán los distritos como herramienta para la participación y la proximidad, conllevando la creación de un Consejo Social, en el que estarán representadas las principales organizaciones económicas y sociales, dividiéndose la ciudad en seis distritos que tendrán concejal y presupuestos propios.

Desde la Federación de Asociaciones Vecinales de Badajoz y Poblados Siglo XXI esperamos que en todas estas valoraciones, las realidades superen a las promesas y a las palabras, para que no tengamos una copia de lo que viene pasando con el Reglamento de Participación Ciudadana. Es decir, que las promesas no sean renovadas. Por lo que sería conveniente que se iniciara un proceso de diálogo que con tiempo suficiente nos llevara a podernos presentar con el inicio del próximo año con los deberes realizados.

Es de esperar y sería positivo, que los presupuestos de 2024 contemplaran capítulos que acompañen a las palabras en forma de partidas económicas. Desde nuestra Federación de Asociaciones compartimos que sería un escenario que nos situaría en la herramienta de creer en el modelo de participación que se contempla en lo aprobado recientemente. Pero hay cosas que deben cambiar, porque no se entendería que lo que se contempla y se reconoce en las ciudades de Cáceres y Mérida a las Asociaciones Vecinales no se empezara a cumplir en nuestra ciudad. Y por ello decimos que hay que pasar de las palabras a los hechos. Porque no se entiende que en Cáceres, las Asociaciones de Vecinos puedan proponer proyectos e inversiones y llegar a ser aprobadas por el Ayuntamiento de la ciudad, y en Badajoz eso no se pueda realizar, a pesar de estar contemplado en el artículo 7 del Reglamento citado anteriormente.

Como no se entiende que en Mérida, que forma parte del “club” de las ciudades y capitales adheridas a la “ley de grandes ciudades”, se establezcan subvenciones económicas nominativas como ayuda para las fiestas populares de los barrios para la realización de propuestas y actividades culturales y musicales, y en Badajoz no se concedan. Una ayuda que propusimos al equipo de gobierno a raíz de que varias asociaciones de vecinos no podrían sufragar los gastos que ocasionan unas fiestas que tienen mucho arraigo entre los vecinos y vecinas consiguiendo dinamizar actividades y que interiorizan el sentimiento de pertenencia a un barrio y que en definitiva hacen ciudad.

Y todas estas políticas que tienen una clara relación con creer en un modelo de participación y de compartir la idea de la necesidad de una sociedad civil como actor que puede dinamizar la participación de la ciudadanía, son propuestas que desde nuestra Federación nos gustaría que se escucharan y se valoraran. Porque hacemos ciudad dentro de nuestros barrios y poblados. Porque compartimos y creemos que debe abrirse un tiempo nuevo para que las oportunidades para el desarrollo económico tengan en la igualdad social el acompañamiento y la alternativa, para que de esta forma, Badajoz tenga en la descentralización administrativa de la gestión la posibilidad de atender mucho mejor a los ciudadanos, con una administración más ágil, más moderna y mucho más cercana.

Es por ello que siempre hemos propuesto al Ayuntamiento nuestra colaboración y disposición al diálogo. Porque entendemos que la administración más cercana a la ciudadanía tiene que ser una ventana abierta siempre a las propuestas. Y desde la Federación de Asociaciones Vecinales tenemos propuestas que están centradas desde el conocimiento de nuestros barrios y poblados y desde la experiencia del contacto diario con nuestros vecinos y vecinas.

Siempre las iniciativas que nacen desde la participación y el consenso tienen un recorrido mucho más completo, y para desarrollar un cambio como el acordado con la adhesión de nuestra ciudad, es necesario pensar en futuro y creer en un modelo de participación donde el componente ciudadano y social refuerce el cambio. Pensemos juntos y hagamos posible ese cambio. Pensemos juntos en convertir a Badajoz en la ciudad de referencia de nuestra querida región. Porque todos #JuntosHacemosCiudad.

sábado, 22 de junio de 2024

Yo estuve allí....

Hay momentos en nuestro río de la vida que se sienten de manera especial y se quedan en los adentros para siempre. Son esos momentos inolvidables y únicos que todos podemos llegar a vivir. Permanecen y nos acompañan durante el resto de nuestra vida. Sí, en ese interior que podríamos llamar como el secreto del alma, si es que existe como tal. Pienso que hay que dedicarse esos momentos porque al final son lo que nos quedarán y nos llevaremos hacia el lugar donde algún día tengamos que estar. Hay que vivirlos y disfrutarlos porque sólo vivimos una vez. Porque la vida nos puede dedicar esos momentos de felicidad y tenemos el derecho a ser felices. ¿Porque, qué es la felicidad? Acaso no es vivir el momento disfrutando con lo que podemos sentir?. Por ello nos tenemos que dar tiempo para amar, ser, disfrutar, pensar, sentir, porque puede que sean esos momentos los mejores de nuestra vida. Nos lo decía José Luis Sampedro "el tiempo no es oro, el oro no vale nada: el tiempo es vida".

Llevaba mucho tiempo sin hacer un viaje largo en tren. Siempre me encantó. Mi origen y mi infancia, mi procedencia por ser hijo, nieto y sobrino de ferroviario. Cuántas historias soñadas y disfrutadas en aquellos años desde la sencillez de aquellos viajes aprendiendo a hacerme adulto. Un viaje en tren que me permitía disfrutar desde ese sentir en ese momento pensando en la experiencia que iba a vivir. De pie en la ventana de la cafetería del tren. Observando con la mirada puesta a lo lejos. En esos valles y montañas que hay que superar y que nos enseñan tanto para la experiencia de nuestro rio de la vida. Tan lejos miraba como podía soñar lo que en las próximas horas viviría. Pensando en vivir ese momento después de mucho tiempo soñando en ello. Contando las horas que me permitirían vivir algo inolvidable y único. Sabía que no me iba a defraudar. Cómo nos va a defraudar aquello que nos hace temblar por dentro y que nos puede poner a los sentimientos a flor de piel. Imposible, porque los sentimientos son algo natural que nos llena de emociones que aparecen por todos los poros de nuestro cuerpo. Y la vida en buena parte, es vivir las emociones.

Han pasado unos días y la mente está más relajada. Ahora los recuerdos invaden esos momentos vividos. Únicos y sencillamente maravillosos. Me fui a vivir el ambiente unas horas antes. No importaba el no conocer a la gente, porque su música hacía que te conocieras y te pudieras relacionar con la gente como si hubieras estado todo un día compartiendo. El tiempo es vida y esas tres horas del concierto que viví viendo y escuchando a Bruce Springsteen en Madrid remueven el alma y la renuevan, haciéndote disfrutar cada minuto como si se detuviera el tiempo y estuvieras en un permanente gozo con lo que se puede llegar a sentir. Es una experiencia muy recomendable. Mágica, porque el concierto es espectacular y tiene magia. Te hace soñar. Te hace sentir y darle a la vida toda la dimensión que podamos llegar a alcanzar. Dar valor a vivir el momento, porque esas horas se quedan en los adentros de los sueños y del corazón.

Lo vivido y disfrutado ya no puede quitármelo nadie "que me quiten lo bailao"....Yo estuve allí. Hablando en el palco con los que compartí el concierto me encontré con gente que como yo era la primera vez que lo veían y también una pareja que era la séptima vez que asistían. Se respiraba en nuestro interior un mundo de afectividad y emociones. Un estar en posición de pertenecer al mundo de los afectos hacia una persona que lleva muchos años emocionando y llenando de fuerza y sentimientos a millones de personas. Han pasado unos días y sigue golpeando en mi interior esa fuerza de esa noche en forma de sentimientos inolvidables y maravillosos. Es posible que sea la proximidad de la noche mágica de San Juan que cada año me hace agradecer a la mujer que me trajo al mundo el seguir disfrutando de la vida. Por ella y por toda mi familia que me animó para poder asistir a vivir algo único y sencillamente espectacular. Boss, muy GRANDE...."Yo estuve allí".

domingo, 16 de junio de 2024

El vuelo de los vencejos....

En este espacio donde el silencio de la mañana te permite observar y refrescarte. Pensar y reflexionar sobre esos momentos en los que el tiempo se detiene en nuestro interior. Donde se asoman los recuerdos de conversaciones y levantas la mirada hacia ese cielo azul que invaden en la cercanía los llamados vencejos. Con su vuelo rápido y vertiginoso que por momentos parece que van a chocarse. Ajenos al silencio y sobre todo al ruido, pero prefiriendo la libertad de volar sin importar la velocidad. Sin resignarse a que otros les marquen no ya el vuelo, sino también el camino. Podríamos llegar a ser todos un poco vencejos que teniendo una mirada hacia los problemas cotidianos, los bulos y mentiras de hoy más las convulsiones políticas con las que nos enfrentamos los ciudadanos, no nos resignaran a dejar de volar, pensar y reflexionar.

Y en ese vuelo desde la observación compruebo como todos se respetan. Aparecen y desaparecen en su velocidad y en su forma de registrarse, en su forma de reclamar su camino. Desaparecen para presentarse de nuevo haciendo curvas, porque las curvas también forman parte del paisaje y ellos las saben controlar. Como igualmente saben controlar el no pisar la tierra, porque siempre están volando y para ellos es como si andar constituyera un peligro. Quizás por su dificultad o por no saber andar. Ajenos de nuevo al ruido y a la contaminación de este tiempo. Ellos no tienen dificultad en seguir volando donde encuentran su libertad. Puede que sea por no querer saber nada de los otros que se encuentran abrazando el viento. Puede que sea por un peligro que sólo ellos ven y que al comprobar que son más grandes y pesados, les hace pensar que es un peligro y prefieren no arriesgar. Guardar su espacio y reencontrarse felices en la soledad de su vuelo es su objetivo y se puede decir que lo consiguen.

También es posible que los vencejos no quieran cambiar su camino. Hasta es posible que tengan miedo al cambio. Porque se preguntarían si merece la pena. Porque son más bien tradicionales y para ellos poder seguir volando en su mundo les resulta más confortable. Puede que sea una causa y trato de hacer volar una metáfora que se me ocurre mientras escribo. Porque cuando los vencejos se juntan y coinciden volando por la misma calle comprobamos que hay espacio para todos. Y si los vencejos se juntan, coinciden en el mismo espacio y no se resignan a que se produzcan cambios, igual es esta la razón por la que nadie les dice que eso no lo pueden seguir haciendo, porque hoy los tiempos han cambiado y se trata de compartir y participar. Compartir, participar y superar la fuerza del viento, al igual que hacen las grullas cuando al volar se colocan en forma de flechas.

Y si seguimos así, nos podríamos preguntar. Preguntarnos, porque si no volamos en forma de reivindicarnos, en forma de no resignarnos, ¿a quién le estamos dejando el espacio por el que todos deberíamos poder volar respetándonos?. ¿Le dejamos el espacio al ruido y al bulo, a la contaminación de aquellos medios que han nacido para hacer más negra la nube? Y quizás se trata de ello, de preguntarnos, de reflexionar y no resignarnos y también de reclamar el espacio que como parte de esta sociedad nos pertenece. Por ello los vencejos no se detienen. Porque saben que a la dificultad de hacerlo, otros que son más grandes, pesados y poderosos no les dejarían volver a volar en libertad. Y volar en libertad significa hacer más grandes las avenidas para que todos con respeto podamos volar por ellas.

sábado, 8 de junio de 2024

Elecciones Europeas....

Durante estos días pueden llegar a resonar varios ecos en nuestras mentes. No son bulos ni mentiras. Es la realidad con la que estamos conviviendo y que nadie pensaba que durarían tanto como están durando. Son los ecos de las bombas, de los misiles y de la sinrazón. No hay que pensar igual para escucharlos, verlos o leerlos porque pienso que de una u otra manera casi todos los tenemos en nuestro interior o eso quiero llegar a pensar . Quiero pensarlo porque son realidades que pudiendo parecer lejanas están más cerca de lo que pensamos, y por  lo menos a mí me preocupan. Es un decir, pero de un tiempo a esta parte las preocupaciones que nos pueden afectar a todos es como si nos la hubiéramos tomado como que no son nuestras y por tanto podríamos llegar a pensar que a nosotros no nos tocan. Quizás es que los ruidos en forma de hojas que se escriben y suceden a diario nos están impidiendo ver el bosque, al estar más pendientes de los detalles.

Se está conmemorando en estos días el 80 aniversario del desembarco de Normandía al que han asistido los países más poderosos que participaron en aquél conflicto y algunos otros menores. Definir como una contradicción la conmemoración de un conflicto quizás no sea correcto. Pero me sale escribirlo así, porque me golpean las dos guerras que estamos sufriendo en la actualidad. Dos guerras que siguen su diario de cifras de muertes y bombardeos. Da igual que sea un hospital, una escuela o simplemente en las calles. Da igual que sean hombres o mujeres, niños o mayores. Podemos llegar a pensar que como no somos nosotros y pensamos que nos pilla lejos. Siempre me pasó lo mismo con los conflictos bélicos. Será que me recuerda aquellos trece meses del servicio militar y me golpean algunas estrofas de la canción de Víctor Manuel cuando habla de que las guerras no le sean indiferentes. Que no nos sean indiferentes. Y alguno podrá llegar a pensar que no le afectan estos conflictos, porque como se dice en algún caso "haberlos haylos".

Estamos a principios de junio y de nuevo tenemos elecciones. Empezamos el año con las elecciones autonómicas en Galicia, le siguió el País Vasco, continuaron las de Cataluña y ahora nos toca votar por las elecciones europeas. Menudos seis meses llevamos. Alguien podría decir que en este año no se ha hecho otra cosa que celebrarse elecciones y casi tendría razón. Unas elecciones a las que se presentan un total de 34 partidos políticos o coaliciones de partidos. Sí, 34 candidaturas!. Hay candidaturas de todos los colores que llaman la atención por sus nombres. Reflexionaba en relación con ello y sobre el gasto que todo un proceso como este conlleva. Existe una normativa electoral que regula estos procesos y los requisitos para poder presentarse a unas elecciones, pero se me ocurre que quizás habría que dar una vuelta a la ley. Habrá quien piense lo contrario, pero hay partidos que todo el mundo sabe que no sacan ni los votos que los números de su candidatura conforman.

Pero tocan elecciones europeas este domingo 9 y hay que votar. Votar, porque si no lo hacemos es como si otros lo hicieran por ti. Entre otras razones hay que votar para acaban con la ola ultra que recorren los países. Si lo de Normandía tuvo una justificación, es que había que acabar con un régimen fascista encabezado por Hitler y apoyado por Mussolini. En esta ocasión es nuestro voto el que tiene la posibilidad de acabar con la ola ultra que recorre la Unión Europea. Y con nuestro voto en una Comunidad como la nuestra reforzamos la idea de Europa. Porque Extremadura es un reflejo de lo que han representado las políticas europeas. No hay un pueblo o una ciudad de nuestra región que no tenga una referencia en forma de recursos o infraestructuras de lo que han representado esas políticas. Sólo con pensar en ello sería suficiente para ir a votar y hacerlo por la opción que mejor ha representado la defensa de los valores humanos y el respeto a los derechos fundamentales. Por eso pensemos al ejercer nuestro derecho en Más Europa+PSOE porque será el mejor argumento para seguir construyendo una Europa más solidaria y más social.

lunes, 3 de junio de 2024

Compartir y convivir....

Esta última semana han coincidido muchos "festolines" en la ciudad de Badajoz, que diría mi compañero tertuliano de la Academia de Onda Cero, Álvaro Meléndez. Es el nombre que le suele dar a cuando hay fiestas. No es que las critique, pero en alguna ocasión ha dicho que estamos pensando en exceso en las fiestas o que hay un calendario sin estar publicado ni ser oficial, pero que en resumidas cuentas no hay un mes en que no haya actividades que podríamos denominar con ese nombre que ya nos hemos aprendido todos en la tertulia y que seguro que muchos oyentes también.

Entre la Fiesta de Los Palomos, declarada como fiesta de interés turístico regional y otras menores que se han celebrado en algunos barrios de la ciudad, hemos tenido un fin de semana de "festolines" a lo grande. Si a ello unimos la final de la Champions y su celebración en plan festivo por los muchos madridistas que hay en la ciudad, pues se podría decir que no había una zona de la ciudad sin un espacio festivo. Pude leer en alguna de las redes que ojalá hubiera el mismo compromiso con el equipo de la ciudad y no sólo cuando se regalan entradas. Quizás es que lo que pasamos hace tan sólo cuatro años nos ha cambiado y hoy tenemos como una cierta necesidad de vivir si cabe con más intensidad o es que al final lo que nos sucede es que nos gusta la fiesta, porque como llegó a decir alguien que llegó a ser Presidente de nuestro país,  "los españoles son muy españoles y mucho españoles".

También somos gente que buscamos el compartir y convivir. Algo muy necesario y saludable en este tiempo que estamos. Necesario porque en las ciudades no se comparte igual que en un pueblo. La gente estamos como más metidos en nuestra faena de cada uno y casi no nos saludamos a excepción de los que vivimos en el mismo edificio o con aquellos que compartimos algún día durante la semana al salir a dar un paseo o a disfrutar un ratito sentados en una terraza. En un pueblo es muy difícil no saludarse o preguntarse, porque la gente se conoce y se saludan por su nombre. Y esa es una de las razones del compartir y convivir en las ciudades. Porque un ambiente de sana convivencia se construye cotidianamente desde la experiencia y el contacto con otros que viven a tu lado, que pasan por la misma acera que tú pasas y que cuando necesitas un ratito para conversar o descansar se ofrecen de forma desinteresada para pasar un ratito sentado en un parque o dando un paseo y poder charlar, y todo esto nos lo podemos encontrar en el barrio donde convivimos y compartimos.

Por todo ello y por otras razones, siguen siendo muy importantes las fiestas en los barrios. Porque se exponen los trabajos de los talleres de toda una temporada y se llevan a cabo conferencias y exposiciones. Porque se muestran los trabajos artesanos y de vecinos que de forma anónima tienen pequeños tesoros a los que se dedican de forma altruista. Porque se realizan actividades culturales y musicales. Porque se realizan calderetas o paellas en el día del vecino. Y porque los vecinos y vecinas durante esos días nos acercamos más y nos preguntamos. Porque al final somos pequeños espacios de ciudadanía que enriquecen las relaciones y que ayudan a que la convivencia, el respeto y el reconocimiento se produzca. Por eso no se entiende que el Ayuntamiento no apueste por dar más facilidades y ayudas a las Asociaciones de Vecinos que consiguen dinamizar y dar un poquito de color al barrio donde un día los ciudadanos que conviven y comparten apostaron su proyecto de vida, porque apostar por la pluralidad y por la sana convivencia nos permite desarrollarnos como personas y vivir desde el reconocimiento y el respeto a los valores humanos.

sábado, 1 de junio de 2024

Nos preocupa Badajoz....

Hace unos días la Federación de Asociaciones Vecinales de Badajoz y Poblados llevaba a cabo una concentración contra el abandono de recursos e infraestructuras en los barrios de Badajoz con el lema “Nos preocupa Badajoz”. Y ese nos preocupa tenía todo el sentido, porque no se trataba sólo de reflejar un abandono. También se denunciaba que la falta de recursos e inversiones en muchos de los barrios de la ciudad estaba generando que la desigualdad siguiera creciendo.

La campaña ha puesto en público lo que normalmente no se ve. Y ha sido una campaña que ha puesto ojos a la evidencia. Y las evidencias no hace falta contarlas, se comprueban a diario. Habría que remontarse a mucho tiempo atrás para comprobar que nunca el estado de las calles y las aceras, las fuentes y los parques se encuentran en tan mal estado. Había que evidenciar como una serie de infraestructuras se encuentran paradas o en estado de haberse iniciado y así siguen. Había que manifestar el estado de silencio de lo que está pasando con una infraestructura que iba a generar riqueza y empleo en la ciudad, y abierta todas las puertas se encuentra cerrada. Había que comprobar las promesas realizadas que son renovadas cada cuatro años, convirtiéndose de nuevo en un anuncio periódico.

Entonces qué está ocurriendo en Badajoz?. Puede que lo que esté pasando es que la ciudadanía esté cansada y comprueba cómo sus problemas no se resuelven. Puede que también tenga un hartazgo de comprobar cómo los políticos están a sus problemas y no están en los problemas de la gente. Y llegado a este punto, puede que tengan razón. Pero hay una cuestión clara y es que en este mundo que compartimos, si no haces política, te la hacen. Y si entendemos la política como la gestión colectiva de las condiciones que nos afectan, su hacer o no hacer, o cómo hacer, nos está afectando directamente a nuestra vida cotidiana.

Por eso resultaba llamativo, escuchar a algún responsable municipal relacionar la política con las Asociaciones Vecinales. Porque recogiendo esta valoración, lo que se podría decir es que no resignarnos a aceptar pasivamente lo que deciden otros sobre nuestra vida es hacer política. Y es que todo cuanto afecta a nuestra vida tiene que ver con la política, pero sobre todo con aquello que son derechos que están aprobados y que no han sido desarrollados.

En este nuevo tiempo la parte de la sociedad civil que representan las asociaciones vecinales lo que quieren es que alguien rinda cuentas no sólo una vez cada cuatro años. Dar explicaciones, justificar, explicar y asumir responsabilidades. Por eso el lema “Nos preocupa Badajoz” tenía todo el fondo de mostrar a la opinión pública que no sólo tenemos el deber de pagar, sino que como pagamos, tenemos el derecho a exigir que los recursos e infraestructuras estén en las debidas condiciones para poderlos disfrutar. Y llegamos a Junio sin presupuestos. Preocupante.