"El disputado voto del señor Cayo"

Una editorial en esta última semana de uno de los medios más influyentes del país y por tanto de los más leídos, era muy esclarecedora del porqué el próximo 10 de noviembre los ciudadanos y ciudadanas estamos convocados a unas nuevas elecciones por cuarta vez durante los últimos cuatro años. El titular era duro, pero no por ello no realista. Culpaba a los partidos políticos del fracaso de la legislatura, no a las Instituciones.

Ahora los grandes partidos estarán analizando y preparando los mensajes. Preparando los relatos para hacer culpable al otro o a los otros del fracaso. Y no hay culpables en solitario, pero sí hay responsables. Van a tener que acertar en el relato y en  el mensaje de la campaña electoral. Será interesante conocer el cómo van a ilusionar al electorado para acudir a votar. Será clarificador conocer quién es capaz de controlar el nivel del relato de este fracaso, porque uno de los objetivos debe ser conseguir movilizar a la ciudadanía de que hay que volver a votar. Puede que no sea positivo elevar el tono del relato, porque éste ya lo conoce la ciudadanía y puede ser muy negativo querer culpabilizar al otro cuando este fracaso es compartido.

En las fechas que estamos nadie es capaz de atreverse a valorar un posible resultado. Es posible que los resultados de las encuestas que se publiquen no se parezcan a las que se hagan de aquí un mes. Va a haber más volatilidad en el voto que nunca, porque nunca antes hubo una situación similar y la abstención podría ser la mayor por el cabreo general de la ciudadanía. Pero hay que ir a votar y ese debe ser el primer objetivo. Convencer a la ciudadanía de acudir a votar. Y será clave no cabrear más a la gente de lo que ya lo está. Cuando se asumen las responsabilidades y se dicen, no debería de entenderse como un signo de debilidad, sino como un claro ejercicio de sinceridad y responsabilidad.
Leía hace unos días que la ciudadanía cada vez vota menos por lo que dicen los programas electorales y más será así en estas próximas elecciones. Siempre son muy importantes los debates en la televisión, pero creo que en esta ocasión van a ser vitales, fundamentales. Algunos se la van a jugar.
Escuchaba a un profesor que hoy ya no se prepara a la gente para el diálogo, se les prepara para el debate. Tiene relación esa reflexión con aquello que decía una periodista esta mañana. Los políticos están demasiado pendientes de lo que dicen los medios de comunicación y cada vez menos de lo que piensan los ciudadanos, de ahí que en los debates sólo se escuchan críticas y descalificaciones.
Van a ser unas elecciones muy reñidas, donde puede que se vaya a volver a recordar a Delibes y su relato de "El disputado voto del señor Cayo" ...porque los partidos saben que es en el medio rural, en esa España vaciada donde está la clave al elegirse un porcentaje de diputados que al final serán los que hagan subir o bajar el número de escaños y puedan dar una mayor representación, junto a conseguir que la frustración no conduzca a una gran abstención...Por el interés te quiero Andrés. Por tu voto vengo al pueblo.