Grande Pescueza y sus gentes...

Soy de un pueblo de la provincia de Cáceres que está cerca de Pescueza. Garrovillas podría estar más cerca aún, pero el embalse de José María de Oriol (Alcántara) lo alejó, como lo distanció de tantas otras cosas. Sobre ello escribí en alguna ocasión, pero habrá que escribir más algún día en éste Puente de Alconétar. He estado varías veces en el pueblo que tiene entre una de sus banderas "el Festivalino", por el que han pasado algunos de los mejores cantantes del panorama musical español, al que también se le llama cariñosamente el festival más pequeño del mundo y que ofrece y combina conciertos y actividades medioambientales. Son muchos encuentros de recuerdos de dos años viviendo y trabajando muy cerca, en Portaje. Esas largas tardes que dejaron de ser aburridas cuando descubrí por Cachorrilla la maravillosa ruta y las vistas de los Canchos de Ramiro, un lugar mágico llamado el pequeño Monfragüe.

En una entrevista que le hicieron a la Consejera Nuria Flores hace unos días, decía que "Extremadura es un escenario natural. Cada rincón que existe en cada ciudad y en cada pueblo, es un privilegio del que debemos presumir, porque realmente tenemos una tierra rica en muchas cosas, donde no tenemos que envidiar a otros sitios, que hay que salir y que nos lo tenemos que creer". Es cierto, porque desde Las Hurdes y La Vera a Tentudía ó desde la Siberia-La Serena y las Villuercas a los rincones de las ciudades templarias y del exquisito jamón ibérico, paseando por los pueblos fronterizos como puente de leyendas de la denominada Raya de Extremadura, son espacios naturales maravillosos para disfrutar.

Y en ese camino de norte a sur y de este a oeste, nos encontramos con un pueblecito pequeño. Un pueblo que en los últimos meses ha recibido varios reconocimientos y distinciones. Que ha aparecido en televisiones y diarios tanto a nivel nacional como internacional con grandes reportajes. Con titulares como "el pueblo que hace fácil la vida a sus mayores" "el pueblo que protege y cuida a sus mayores", etc. El pueblo que puso en marcha una iniciativa denominada "Quédate con nosotros" y que facilita la vida a sus mayores poniendo a disposición transporte, rampas, barandillas, videovigilancia. Un pueblo donde hacía muchos años que no había niños ni colegio y que ahora vuelve a tenerlo porque volvieron los niños. Como decía el Presidente de la Asociación Amigos de Pescueza "con la mejor vida, llega la nueva vida".

Y es que antes el anterior Alcalde y ahora el actual, quieren que los abuelos pasen sus últimos días en su hogar, en sus calles, en la plaza pequeñita de toda la vida, porque con su constancia y esfuerzo consiguen con ese tipo de acciones que se fije la población en el medio rural. Resulta extraño que un pueblo que destina el presupuesto municipal a mejorar la vida de sus vecinos sea noticia. Y, sin embargo, lo es. Y esta es precisamente una contradicción, porque esto debe ser considerado como lo normal en un Ayuntamiento, el dedicar sus recursos en gran medida a mejorar la vida de la gente, de su gente. Porque la gente de Pescueza saben que antes José Vicente, y ahora Andrés no son políticos, son gente de Pescueza y la gente de pueblo identifican a quien es de su gente.

En alguna ocasión hemos comentado en este Puente de Alconétar que nuestra región está llena de innumerables espacios tantos naturales como culturales. La historia está ahí y cada vez es mayor el reconocimiento a nuestro inmenso patrimonio. Y en esa historia de antes y de ahora, de ayer y de siempre existe un patrimonio natural que es la gente, la gente de nuestros pueblos que hace como Pescueza más fácil la vida a la gente, a la de aquí y a la de allí, a la de todas partes.

Pescueza no ha buscado un altavoz porque la hospitalidad, sencillez y naturalidad de su gente ya lo era, pero sí me parece justo reconocer que un pequeño gran pueblo ha pasado a tener un gran reconocimiento...quizás hasta por aquello, que debe ser verdad y que dice que "aquello que no se conoce, no existe". 

Pescueza existe y se conoce. Grande Pescueza y grandes son, sus gentes.