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martes, 12 de noviembre de 2019

Es un buen principio de Acuerdo...

La experiencia dice que solo cuando se comparten responsabilidades y se asumen compromisos con la firma, es cuando se cumple con la responsabilidad de lo firmado, porque compartir el poder obliga a lealtades compartidas y a ejercer responsabilidades de gobierno. No hace 48 horas de la celebración de las elecciones y el PSOE y Unidas Podemos han llegado a un preacuerdo para un Gobierno de coalición. Creo que es un buen principio de acuerdo y una forma inteligente el conseguirlo cuanto antes, por las posibles presiones de dentro y de fuera, así como de otros poderes que siempre podrían haber tenido la tentación de haber torpedeado su logro. Recuerdo la primera decisión de Zapatero cuando tomó posesión en 2004. En tan sólo 24 horas firmó el que las tropas españolas volvieran para casa. Algo que fue criticado por algunos países, pero muy aplaudido por la ciudadanía española.
El PSOE y Unidas Podemos han dado el primer paso para formar un Gobierno de coalición, una fórmula que nunca se había dado a nivel nacional desde la restauración de la democracia. Y lo han acordado celebrándolo con un gran abrazo que tiene mucho de simbolismo, aunque pueda sorprender por el calor y el entusiasmo del mismo. Han dicho y ello es importante, que es sin reproches. También que es para superar la decepción que supuso para todos los progresistas, el no conseguirlo en el mes de Julio. Es positivo el reconocer por ambos, los errores desde el principio y por ello es responsable el que lo hayan compartido. El refranero español es rico y variado y aquí podríamos utilizar aquel que dice "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy"...
Es posible que este Acuerdo tenga dificultades para llevarse a cabo. Es posible que los pequeños partidos vayan a querer que se les pague bien sus apoyos. Hay muchos partidos regionalistas, a los cuales su apoyo se convierte en imprescindible. Esto no debe llevar al futuro Gobierno a romper y desgajar los presupuestos en pequeñas porciones territoriales, porque hay asuntos que garantizar como son entre otros, los derechos sociales y la igualdad entre todos los españoles.
Otro de los refranes para el caso es aquel que dice "más vale tarde que nunca". Viene a decirnos que lo importante es hacer las cosas, aunque sea con retraso, frente a no hacerlas nunca. Podría interpretarse como algo real lo sucedido, porque al final se está haciendo aquello que se debió de hacer.
Y el Acuerdo es positivo porque como dice otro de nuestros refranes "Nunca es tarde si la dicha es buena", que nos indica que la ventura es siempre bien recibida, que nunca es tarde para llevar a cabo algo útil y beneficioso. En este caso la dicha tiene que ser buena sí o sí y tiene que tratar de ser beneficiosa para todos aquellos y aquellas que hemos vuelto a confiar en la política y les dimos una segunda oportunidad.
Y al margen de los Acuerdos, los dos partidos de izquierda que capitalizarán el futuro Gobierno, deben de ser autocríticos y aparte de reconocer sus errores, deben actuar siendo consecuentes con los principios que forman parte de su ideología y no dejarse llevar o manipular de nuevo por los cantos de sirena de sus propios entornos. 
Siempre se aprende...y de los errores en política están llenos muchos kilómetros de papel.

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