Y ahora qué?...

Ya hemos votado y ya conocemos los resultados. Ahora las palabras responsabilidad y compromiso de todos los partidos con nuestro país y con aquellos que seguimos creyendo en la política y en su necesidad como mejor instrumento de los ciudadanos para conseguir mayores cotas de igualdad y progreso, deberían ser las que prevalecieran por delante de cualquier otra, porque ahora toca formar Gobierno. Y ahora hay que hablar mucho y predicar menos. Hay que hacerlo desde el primer minuto. Sin reproches, si es posible. Más hablando en los despachos y menos antes los medios. Sin mirarse el ombligo de cada uno y sí mirando el de todos los ciudadanos. El país lo necesita imperiosamente, por lo que toca hablar con mucho sentido común y sobre todo ser muy humildes. 

Hay que abandonar los egos, porque sería una absoluta vergüenza y un total despropósito que no soportaríamos más los ciudadanos, el tener de nuevo que celebrar elecciones porque no se consigue un acuerdo para formar un Gobierno. Que las sumas hay que hacerlas componiendo una buena cuenta, por supuesto. Porque si no, esto no sale. Por eso decía que con mucha humildad. Para que podamos comprobar que la segunda oportunidad que les hemos dado ha merecido la pena.

Escribía en mi anterior entrada que muchos ciudadanos se hacen la pregunta...Para qué sirve hoy la política? Los políticos actuales tienen la respuesta. Ahora tienen que demostrar que la política sirve, que la política es garantía para poder cambiar las cosas, que la política es progreso y conseguir mejorar la vida de los ciudadanos. Que la política es tener sanidad, educación, empleo, pensiones, asistencia social, ayudas sociales, vivienda, infraestructuras y un largo etcétera de posibilidades que parece que se dan como que lo tenemos porque caen de alguna parte, cuando todo ese largo de posibilidades y más, se consigue porque se hacen políticas. Porque la política es la vida de la gente y todas las necesidades que tienen los ciudadanos pueden ser cubiertas porque se hacen políticas.

Sobre los resultados valoro que hay varias consecuencias. Se ha demostrado el fracaso de repetir las elecciones, algo que deberían valorar y no como un reproche, sino para constatarlo como un hecho los dos principales partidos de izquierda y aprender de ello porque son los principales responsables. Una experiencia negativa que debería unir y no desunir. Pedro Sánchez debería valorar que dos de sus objetivos no los ha conseguido, porque por un lado no ha aglutinado el voto de izquierda en torno al PSOE y por otro lado, hoy va a haber un Parlamento más fragmentado. Ahí están los números de la pérdida de la mayoría absoluta en el Senado por el PSOE. Podemos debería dejar la soberbia y sentarse con la realidad de su resultado si no quiere pasar a estar en un terreno de nadie, donde su capacidad de acción y de políticas quede anulada. Deben facilitar que en nuestro país podamos seguir progresando. El PP no consigue lo que de forma apresurada se habían llegado a creer y se ha demostrado que no ha sumado el capital de votos de Rivera y por contra se queda entre la encrucijada del radicalismo ultra o del centrismo. Es curioso que salgan reforzados los extremos de la parte de la derecha y de la izquierda. Se ha conseguido despertar a los que llevaban largos años dormidos y han conseguido un resultado espectacular, premiándose el retroceso y la falta de identidad con la consecución de los derechos sociales que tanto han costado conseguir. El nacionalismo en el Pais Vasco, Galicia y Cataluña crece, hasta el punto de que los de Otegui van a tener grupo propio en el Congreso. Lo de Ciudadanos ha sido en lo único que han coincidido todos los sondeos anteriores y de ahí, tras su espectacular desastre, es razonable y correcto que su líder haya dimitido. 

Y ahora qué?...Tomar nota y ponerse a hablar, para que lo antes posible podamos tener un Gobierno. Difícil y complejo es pero hay que hacerlo posible, porque no hay otra alternativa que la de un Gobierno encabezado por Pedro Sánchez. Todos los partidos deberían tener la disponibilidad para lograrlo porque los números de otra forma no salen, porque todas las posibilidades de gobernar este país pasan por el PSOE.